DE LA MECA A LA SECA

     Sabiendo que a dos de mis hermanos-allá en Argentina- les gustaría leer y "tocar" mis deseos navideños para ellos, pensé enviarles una tarjeta postal.
    Un día pasé por una librería, entré y compré dos hermosas tarjetas que venían cada una con su sobre.
    Llegada a casa por la noche, pregunté:"dónde se compran las estampillas?"
mmmmmmmm...... escuché que decía mi hijo cibernauta mientras danzaba abrazado a su gata cantando: "luz clarita...";  luego dijo: creo que se compran en los estancos (lugares donde se venden los cigarrillos).
    Compradas a la mañana siguiente, escribí mi sincrético pero sentido mensaje de Paz y Alegría; con caligráfica unción, puse los nombres y las direcciones; pegué las estampillas - tan minúsculas ellas que sólo atrapaban dos colores-, y cuando quise cerrar los sobres, oh sorpresa: ¡no tenían pegamento!

     Bah! me dije: mañana compraré una boligoma.
     Así, salí a la zona a buscar el negocio indicado. Y empecé: -Centro de Infancia Las Margaritas, no; Cervecería La Pequeña Graná , tampoco. Seguí caminando y veo de pronto una hermosa vidriera que ofrecía en vivo y en directo:
                                         gambas peladas
                                         filetes de panga
                                         lomo ibérico de bellota (hummm,demasiado tentador...)
                                         lomo de salmón noruego...indiscutiblemente: no era el lugar...
Caminé un poquito más, UÑAS, decía:
                                         uñas de gel
                                         uñas de porcelana
                                         uñas con dibujo
                                         uñas con diamante
                                        pedir turnos....tampoco allí encontraria lo que buscaba.

     Un poquito más a la esquina ofrecían dejarte " Guapa por fuera, guapa por dentro", qué tal?
...Qué buscaba yo? ah! cierto! la goma de pegar...Allá hay un chino, seguro que tiene! ¿Qué tiene?: sartenes,bufandas,pesebres,cortinas,paraguas,bombachas,estatuas,espejos, botones y hasta El Gato de la Suerte saludándome desde un rincón. Pregunto:goma de pegar, tiene?, y como propulsado chinito dispuesto,chasqueando talones, bajito sonriente manotea al bulto y me saca: algodón, un reloj,ruleros, aromatizanates de todos los mares...no hay caso: no entiende. Gracias, digo con una sonrisa y salgo.

De pronto advierto: no haberme dado cuenta antes!!! no busco más la plasticola y en lugar de eso, cambio el sobre! En el chino siguiente, ya aliviada pregunto por sobres y sacan un paquete: 24 sobres de tamaño oficio con todas sus hojas; 8 euros, canta...Calculo y me digo:"y si saludo a mis hermanos por marzo,cuando vuelva?"
Ya van cuatro días...Pienso en lo absurdo de no poder resolver con facilidad cuestión tan simple!
En eso paso por un estanco y pregunto por sobres de carta. Y al punto:"Cuántos quiere la dama?" me dice cordial el gallego. Dos, musito desinflada.-"Pués aquí los tiene!"me dice sonriente....y tenían goma!!!

     Sin poder creerlo, completé otra vez los datos, pegué las estampillas y, con miedo, digo:"habrá algún buzón por aqui?" Siempre galante contesta:"Mírelo, señora,lo tiene a tres pasos".
Y arrastrando, cual dibujo animado, los brazos por la vereda mojada, llegué -con algunas hojas secas que el
otoño insolente pasea, enganchadas en mis dedos, al gordo buzón amarillo huevo, y metí los sobres.

 Sin despegar de allí la mano, imaginé el infinito Atlántico y me dije: suerte que esto es Madrid y no el Puerto de Palos...!!!
Espero que a mis hermanos les lleguen mis augurios, al menos, de la mano del Rey Momo, en los próximos Carnavales...